aprendiendo a estar agradecida

muchas graciasYo no soy muy buena demonstrando agradecimiento. Bueno, tal vez no soy tan mala cuando significa decir “gracias” a la camarera o al recepcionista del hotel. Eso lo hago bastante bien. Estoy menos rápida para expresar mi gratitud a las personas más cercanas a mí… mi marido, mi familia, mi Dios. Es un poco irónico, ya que ellos son los que me dan lo máximo y lo mejor de ellos mismos. Ellos dan durante un largo período de tiempo. Me dan bien.

Supongo que es esa misma consistencia que me lleva a darlos por sentado. Apenas noto el esfuerzo, o lo considero lo esperado y obligatorio… sólo una parte normal de la vida.

Pero el amor y el sacrificio no son ordinarios.

Cuando el esposo se queda con su esposa a través de tiempos difíciles y momentos tristes y se mantiene amando y riendo y dando y perdonando, eso es algo especial. Cuando los niños respetan y disfrutan a sus padres… y unos a otros… a pesar de las heridas y las diferencias y la distancia y el tiempo, eso es algo especial. Cuando Dios ama sin límites, sin condiciones y sin cesar, eso es algo especial.

No hay que darlo por sentado.

Quiero reconocer estos regalos especiales y ser más agradecida. El día de Acción de Gracias es un maravilloso tiempo de reflexión del año. Tristemente con frecuencia se pierde en medio de los otros días festivos; sin embargo es muy importante para mí. Necesito el recordatorio continuo.

Para que no sólo exija y asuma con los que amo… para que recuerde decir “muchas gracias”.

¿A quién quieres agradecer hoy?

proceso hasta el final

La semana pasada escribí acerca de “el proceso”… enfocado principal-mente en los primeros años de una familia joven y tiempos de crecimiento y desarrollo. Todavía estoy en ese proceso.

Tristemente, esta semana me ha recordado más acerca del otro lado del proceso… los años cuando la vida está por llegar a su fin y es momento de prepararse para “ir a casa”.

Aunque personalmente no estoy en ese proceso todavía, algunos de mis seres queridos, sí, lo están. Sus batallas me han hecho reflexionar en la vida y me han desafiado a …

  • Vivir la vida al máximo. Ésta no es una idea nueva para mi – he escuchado esto muchas veces, pero frecuentemente me olvido de atesorar el momento, a la gente en mi vida y las bendiciones que he recibido cada día. Pierdo el enfoque fácilmente y me preocupo de las cosas más insignificantes. Quiero aprender a estar menos estresada por las cosas pequeñas y pasar más tiempo dando abrazos y sonriendo… escuchando a los pájaros y el sonido de la lluvia… oler las flores y el aroma del pan recién horneado… ver lo bueno en las personas y responder a sus necesidades… Mientras tengo energía y salud, quiero trabajar duro en las cosas correctas y honrarlo a Él con cada día.
  • Dejar de lado lo insignificante. Recientemente leí también un lindo blog de una amiga mía acerca de su entrevista con Corrie Ten Boom, Fue un recordatorio poderoso de cuán importante es perdonar a aquellos que me lastiman. Tiendo a tomar las cosas de manera muy personal y preocuparme mucho por lo que los demás piensan de mí. Me frustra la indiferencia, la crítica, el chisme y la falta de apoyo. Estos son problemas tan pequeños, pero la amargura puede robarme la energía emocional y la paz espiritual. No quiero perder tiempo valioso por mi necedad y mi falta de disponibilidad para perdonar.
  • Entrenar a largo plazo. Aunque es verdad que tener buena salud física puede ser irrelevante al momento de mi muerte, también es cierto que tener buena salud será de beneficio si tengo que enfrentar una enfermedad en algún momento… y la buena salud me permite estar completamente comprometida con mi proceso de vida hoy.  Si hago ejercicio y como bien, tengo más energía durante el día y duermo mejor en la noche. Tengo mayor capacidad intelectual, mayor estabilidad emocional y una mejor actitud ante los desafíos diarios. No sé cuánto tiempo me queda en este mundo pero creo que es buena idea planear para un largo viaje.
  • Preparar el corazón. Ya he vivido más años que muchas personas. Estoy agradecida por la increíble y emocionante aventura que he tenido. Estoy especialmente agradecida por la seguridad eterna que tengo en mi relación con Dios. Llegar a conocerlo en la universidad le ha dado propósito a mi vida y paz a mi alma. Quiero ayudar a otros a que le conozcan. Quiero vivir para Él mientras estoy en la tierra de una manera tal que esté lista para irme a casa con Él cuando sea que Él me llame.

Así que hasta entonces, el proceso continúa…

¿Qué es lo importante en tu proceso? ¿Estarías listo si tuvieras que “irte a casa” hoy?

lo que aprendo de una venta de garage

Nos estamos mudando después de vivir 20 años en el mismo lugar. Mi hogar a sido un refugio para cuatro hijos e incontables visitas y huespedes de largo plazo. Durante muchos años, también fue una oficina para el ministerio universitario nacional y una sede de escuela en casa. El patio de atrás fue el lugar de las “pachangas” para cientos de fiestas y celebraciones.Tuvimos más de 50 personas para nuestras cenas del “Día de acción de gracias”  y botanas y comidas y postres para miles más.

Hemos sido tan bendencidos en esta casa. Nos hemos reído y llorado, peleado y perdonado. Hemos estudiado, jugado, trabajado y orado. Hemos crecido en nuestro entendimiento de la gracia y la verdad de Dios… ¡tenemos tantos recuerdos!

…¡y hemos acumulado MUCHAS cosas!!

Nuestra venta de garage es grande… casi todo se irá. Todos nuestros hijos ya están creciendo y continuándo con sus vidas. Ya tampoco tenemos posiciones importantes en el ministerio aquí, y es hora de un cambio… bueno, de muchos cambios.

Estoy aprendiendo en el proceso.

Primero, las cosas son sólo eso – cosas. Puedo desapegarme de casi todo. Dejar ir algunas cosas “me duele” un poco; con otras es divertido ver como les dan provisión y gozo a otros. Nos vamos a quedar con algunas cosas que son especiales para cada uno de nuestros hijos y algunos artículos personales… pero casi todo lo demás se va. No necesitamos muchas cosas, especialmente en esta nueva etapa de la vida. Una buena amiga me recordó que Dios ha provisto perfectamente a través de los años – y que eso no va a cambiar – Él proveerá en nuestro nuevo lugar también.

Segundo, el cambio es bueno. Es refrescante pasar por una “limpieza” como ésta y recordar lo que es más importante. No quiero estar demasiado cómoda en dónde estoy; siempre quiero tomar pasos de fe desafiantes que me provoquen depender de Dios. Quiero aprender y crecer continuamente. Jamás quiero depender de las cosas, o de cierto estilo de vida, o incluso de ciertas personas; dejarlas ir y confiarle mis necesidades sólo a Dios, es bueno para mi. Tampoco quiero que otros dependan de mí; quiero que dependan de Dios. El cambio también es bueno para otros. 

Tercero, está bien llorar por lo que ya pasó y lo que se perdió. Invertir y edificar en la gente para la eternidad es la razón por la que estuvimos aquí. Echar un vistazo atrás y ver todas esas vidas transformadas es satisfactorio y nos anima, pero esas personas especiales son las que son tan difíciles de dejar. Extrañaré muchísimo a mis muy queridos amigos – a varios de ellos probablemente no los volveré a ver. Eso duele y habrá muchas despedidas llenas de lágrimas. Ya terminé la etapa de la vida de “casa llena” – fue increíble y la disfruté mientras duró, y la voy a extrañar, pero es hora de que otros tomen ese rol. Me llevo fotos conmigo… y los recuerdos se han grabado en mi corazón para siempre. 

¡El futuro está lleno de esperanza! El futuro es incierto y desconocido;ciertamente será diferente al pasado, pero puedo enfrentar el futuro con paz porque sé que el amor y las bondades de Dios son nuevas cada mañana (Lam. 3:22-23) y Él tiene planes buenos para mí (Jer.29:11). Cuando veo todo lo que Dios ha hecho en el pasado – Su provisión, Su cuidado, Su dirección – no tengo duda de que Él estará íntimamente involucrado en mi futuro. Así que…¡llevalo  todo! ¡Estoy lista para algo nuevo!

¿Y tú? ¿Tienes muchas cosas? ¿Esas cosas te retienen?

¿Cómo manejas el cambio? ¡Me encantaría aprender de ti!

la mujer moderna de hoy en día – ¡escoge dos!

Esta simple ilustración me hizo reír, así que la subí al sitio web de Pinterest en mi pizarrón de “me hace reír”. ¡¿Creerías que tan sólo unos días después, ha sido re-publicado en el sitio casi 2500 veces (¡!) y marcado con “me gusta” más de 500 (¡!)?!

Si fuera un video de YouTube, ¡podríamos decir que se volvió viral! ¡Ciertamente causó más interés que cualquiera de mis blogs y ha sido visto por más gente que mi número de amigos en facebook! ¿Por qué?

Creo que una razón es porque ¡necesitamos reír más! La risa rompe el hielo, amortigua los golpes y sana la herida… ¡Una buena carcajada tiene beneficios físicos, emocionales y espirituales! ¡La risa es refrescante! La risa les dice a los demás que no importa cuán difíciles sean las circunstancias, Dios es bueno.

Nuestra boca se llenó de risas; nuestra lengua, de canciones jubilosas. Hasta los otros pueblos decían: «El Señor ha hecho grandes                  cosas por ellos.» Salmos 126:2

Estas líneas también proporcionan perspectiva sana a la mentira de que “podemos hacerlo TODO”. El único que todo lo sabe, es omnipresente y todo poderoso es Dios; el resto de nosotros tiene que tomar decisiones. Todos nosotros tenemos que dejar algunas cosas para mañana y hacer una lista de quehaceres que nos tomará algunos días. El resto de nosotros tenemos que vivir por prioridades, aceptar el fracaso y tener gracia los unos a los otros – ¡una y otra vez!

Finalmente, como Pinterest es más frecuentado por mujeres, creo que ese gráfico ha desafiado a las mujeres a considerar sus principales roles en la vida. ¿Qué es lo más importante para mi hoy? ¿Qué debo hacer para servir a Dios y a los demás de la mejor manera posible? Me da gusto de que este pizarrón muestra que podemos reírnos de estás opciones, porque a veces estamos muy ocupadas comparándonos, criticándonos y juzgándonos unas a otras que se nos olvida valorarnos y animarnos a unas a otras para ser todo lo que DIOS quiere que seamos como mujeres.  (más de este tema en futuros blogs)

¿Qué piensas tú del cuadro?

¡Espero que este blog te haya hecho reír hoy! Disfrútalo y enséñaselo a alguien que necesite una sonrisa!

auténtico – mi palabra para el 2012

Mucha gente ha escogido una palabra que la defina para este próximo año…así que decidí pedirle a Dios que me diera una también. Esto es lo que escuché – AUTÉNTICO – mi palabra para el 2012.

                 Auténtico significa: no falso o copiado; genuino; real.                              También acreditado de cierto y positivo por los caracteres, requisitos o                                                   circunstancias que en ello concurren;                                             y honrado, fiel a sus orígenes y convicciones.

emociones auténticas – Estamos pasando por muchos cambios este año – vamos a regresar a los Estados Unidos después de más de 17 años viviendo en nuestro hogar internacional en México. Este cambio tan grande genera anticipación y pérdida. En los siguientes meses quiero ser auténtica acerca de cómo me siento – sin fingir que siento más o que siento menos de lo que de verdad es…no es fácil para decir adiós; a veces quiero desaparecer el dolor. Este año quiero entristecerme genuinamente y dejar que la gente sepa cuánto aprecio el impacto que han tenido en mi vida y cuánto voy a extrañarles.

temores auténticos – El cambio es difícil. Frecuentemente tengo miedo que no voy a estoy a la altura de las nuevas expectativas; que no tendré nada que valga la pena contribuir a una situación nueva; que no sabré lo suficiente para cumplir con la tarea. Me pregunto si “cabré” en el lugar nuevo; ¿me va a gustar? Usualmente controlo y conquisto esos temores y decido tomar el desafío de todas maneras, pero este año me gustaría ser más real acerca del proceso y de la lucha que enfrento. 

necesidades auténticas – No me gusta sentirme estúpida, desinformada o fuera de causas importantes (¿un poco de problema con el orgullo aquí?). Me gusta hacer las cosas bien y no me gusta tener que pedir ayuda. La verdad es que, sin embargo, tengo mucho que aprender y hay muchos quienes pueden ayudar a enseñarme. Quiero leer más este año y hacer más preguntas. Quiero comentar con otros lo que estoy leyendo y aprender de ellos. Quiero hacer una diferencia con mi vida y quiero hacerlo junto a otros. Necesitaré admitir honestamente mi necesidad para poder hacer estas cosas.

auténtico yo – Quiero caerle bien a la gente y que disfruten pasar tiempo conmigo. Quiero que la gente me pida mi opinión y que lea lo que escribo. A veces finjo ser más como los demás – y menos como realmente soy — para agradarles. A veces quiero creer que tengo todo bajo control en lugar de considerar lo que otros de verdad ven en mí. A veces quiero ser como alguien más, pero en 2012 voy a trabajar en estar “ok” con ser yo misma – fiel a mi personalidad, espíritu y convicciones.

auténtica relación con Dios – Ésta área será la más importante y la base para todos los retos que mencioné anteriormente. Debería ser más fácil, porque Él ya sabe quién soy realmente. Me pregunto si Dios sacude su cabeza y pone gesto de fastidio cuando me ve fingiendo. O si Él llora… queriendo que yo acepte y esté contenta con la manera en la que Él me hizo. Planeo tener algunas pláticas auténticas con Él acerca de eso este próximo año.

¿Y tú? ¿Quieres ser más AUTÉNTICO conmigo este año? ¿O cuál es tu palabra (o palabras) para este 2012?

Me encantaría aprender de ti.

usa el pasado para construir tu futuro

Este mes Facebook y Twitter están llenos de “nuevos comienzos”… todos con pensamientos de dejar atrás el año pasado y comenzar de nuevo. Me encanta la idea de tener nuevos comienzos, pero he estado pensando acerca del hecho de que también es importante construir encima del pasado – no solamente borrarlo y dejarlo en el olvido…

Para mí, el año pasado es importante para construir el futuro.

  • el pasado me muestra dónde necesito crecer

Es una experiencia de humildad repasar el año pasado y reconocer dónde metí la pata o en dónde alguien me ha señalado que necesito crecer. Recuerdo las evaluaciones de mi trabajo que indicaron mis debilidades en mi liderazgo. Recuerdo tener que disculparme con mis compañeros de trabajo porque mi nivel de estrés me volvió crítica y gruñona. Recuerdo comentarios en mis trabajos de la maestría que me indicaban nuevos métodos de escritura que no conocía o que me desafiaban a atreverme y tomar más riesgos. Tendré muchas oportunidades para crecer este próximo año. Ya escribí de una idea de anotar algunas de estas áreas ahora para que al final del año pueda ver la diferencia.

  • el pasado me recuerda que no estoy en control

Hay muchas cosas que pasaron el año pasado que no hubiera hecho de esa manera SI yo hubiera estado en control. No hubiera tenido a tanta gente querida enfrentando la muerte, o luchando contra el cáncer, o heridas por comentarios crueles, o con dificultades para pagar las deudas, o… pero no pude detener ese dolor y no pude hacer que otras cosas buenas que deseaba sucedieran. Dios es Dios, y yo no. El pasado me recuerda esa verdad, hoy y para el futuro.

  • el pasado enseña que puedo tomar decisiones cada día

Tengo el poder de decidir CÓMO manejaré lo que sucede cada día. ¿Le daré la bienvenida a la adversidad con fe o con temor? ¿Trataré a la gente con amor o con juicio? ¿Pasaré tiempo en reflexión o estaré demasiado ocupada para ella? ¿Desperdiciaré mi tiempo o invertiré mi salud, energía, experiencia y recursos para el bien de otras personas? No siempre tomé las mejores decisiones el año pasado; lo sé, pero sí tomé algunas… y tengo la oportunidad de tomar nuevas decisiones hoy y en los días por venir.

  • el pasado confirma que Dios es presente y es bueno

Sin importar lo que vea del pasado, me doy cuenta de que Dios redimía, restauraba, renuevaba y refrescaba – aún en las situaciones difíciles. Tuve tiempos maravillosos con mi familia, increíbles recuerdos, grande amigos, risas, metas alcanzadas… y también oré oraciones de angustia y lloré por las injusticias, tragedías y dolores de este mundo. Él siempre estaba ahí y siempre estuvo involucrado. Mis experiencias pasadas me dicen que Él estará presente y trayendo algo bueno en el año que viene.

Se dicen que, “la realidad es nuestra amiga”. El pasado es parte de nuestra realidad; el pasado es nuestro amigo. Posiblemente quieres tomar el tiempo para reflexionar acerca del año pasado en los siguientes días… aprender sus lecciones… y construir sobre ese pasado para tener un futuro aún mejor.

Me encantaría saber… ¿Qué te enseñó el año pasado?

frente a una audiencia de UNO

Hoy leí un blog acerca de una jovencita que está escribiendo un libro y está recibiendo mucha crítica por construir su “plataforma” – su propia reputación – mientras realiza este esfuerzo. Me hizo reflexionar en lo mucho que deseamos hacer algo importante, que valga la pena, significativo con nuestras vidas… sin ser soberbios, presuntuosos o agresivos.

También pensé en cómo Dios algunas veces escoge ponernos en el centro de atención – como líderes, como autores… y a algunos les da la plataforma de “populares”, famosos o celebridades. A veces es temporalmente, a veces es un estilo de vida. Alabado sea Dios por aquellos que representan al Señor a MAYOR escala… en el ministerio, en las librerías, en la política. Que Él los proteja de la tentación y la crítica, y ¡que sea Él quien les de energía, salud y fortaleza para compartir el amor, el perdón y la vida eterna a millones!

¿Y todos los demás? Dios también nos ha escogido y nos ha dado un trabajo. Podría no ser enfrente, en la plataforma principal; puede ser detrás del escenario, no de manera tan llamativa, pero igual de importante.

Hoy estoy contenta con haber sido parte del desarrollo de materiales para muchos de nuestros ministerios de la Cruzada Estudiantil y Profesional para Cristo-México. Ninguno de los materiales tiene mi nombre; no he ganado ningún porcentaje por los derechos y no he firmado autógrafos. He pasado mucho tiempo haciendo la parte detallada y aburrida del trabajo, pero el resultado son recursos de calidad que animan y empoderan a otros para salir a ganar y discipular a otros con el amor de Dios. A veces recibo algunos comentarios, pero básicamente no tengo idea de cuántas personas usarán estos materiales – y nunca lo sabré…

¡Pero Dios sabe! Estoy parada en una plataforma frente a una audiencia de UNO… y eso es suficiente para mí. Quiero dar lo mejor para Él y por Él, no importa lo que esté haciendo. ¿Y tú? Ya sea que estés en casa cuidando a tus hijos, sirviendo en la cocina de la iglesia, trabajando en una oficina, dirigiendo un grupo de estudio Bíblico, escribiendo un blog – o hablando frente a miles de personas en un congreso – ¡Haz tu mayor esfuerzo para DIOS! Él es tu audiencia más importante y ¡Él está aplaudiendo tu espectáculo!

**¡Déjame un comentario y cuéntame de tu espectáculo!  Me encantaría orar por ti.

¡El liderazgo “encarnacional” es como el chocolate!

Como una fanática del chocolate, me encanta la chocolatería de Vianne Rocher de la película Chocolate como una ilustración del ministerio tipo “encarnacional”. La protagonista de la película, Vianne, es “cariñosa, poco prejuiciosa, compasiva, ofrece gracia y paz a la comunidad conflictiva… se involucra en la vida de su comunidad y en sus problemas… abre el espacio para que el decir la verdad y la honestidad se propicien naturalmente”. Vianne hace amistades transformacionales en la comunidad al discernir las preferencias (de chocolate) de cada cliente y recetándole el remedio (el chocolate) apropiado para sus necesidades. Ella se interesa más por las preocupaciones de la gente del pueblo y menos por el éxito de su negocio. Vianne le sirve a la comunidad francesa con los atributos encarnados del amor, sacrificio propio y compromiso. Como resultado de su compasión y aceptación, el ministerio de Vianne transforma las vidas de sus amigos y la villa completa.

La historia más grande del poder transformacional a través de la encarnación  personal es la de Dios mismo viniendo a vivir entre nosotros como un humano en la persona de Jesucristo. (Fil. 2:7) Un modelo de liderazgo “encarnacional” es la disposición a re-hacernos a nosotros mismos para imitar a Jesús más efectivamente en nuestra vida y en nuestro trabajo. El ministerio “encarnacional” no significa que los líderes abandonen completamente su identidad cultural (nacionalidad / género / personalidad). Jesús no dejó de ser Dios; Él escogió limitar ciertos aspectos de su carácter y de su poder. De la misma manera que un cuerpo ilustra como la variedad de dones espirituales son necesarios para servir a Dios completamente (1 Cor. 13:4-31), también son necesarios los elementos de todas las culturas para reflejar la imagen de Dios completamente. (… ¡toda una caja de chocolates!) Ninguna cultura es perfecta cultura de Dios. A veces algún aspecto de una cultura puede representar más el carácter de Dios que otra cultura; en otras situaciones varias perspectivas culturales combinadas reflejan mejor el carácter de Dios; a veces un aspecto cultural puede ser definitivamente no bíblico y un líder debería renunciar a ese valor. El liderazgo “encarnacional” requiere mucha reflexión y mucho esfuerzo para determinar cuándo y dónde hay que hacer cambios para ser más como Cristo.

Aplicar el modelo de servicio “encarnacional” no es fácil. Puede causar duda, confusión y frustración. Como líderes tomamos una posición de liderazgo con un sentido de identidad profundamente arraigado que se ha desarrollado durante toda la vida. Nuestro etnocentrismo asume que otros tienen o deberían tener los mismos valores culturales porque mi perspectiva es “mejor” o la perspectiva “correcta”. Inevitablemente los líderes contribuirán con su orgullo y egoísmo a la situación y frecuentemente juzgan a otros negativamente como inferiores o equivocados. Los intentos por servir y dirigir en otra cultura o con compañeros de equipo de diferentes culturas también se verán afectados por las perspectivas que otros tengan acerca del servicio y el liderazgo. Recuerda: una acción no es servir simplemente porque se le llame servicio; la acción debe ciertamente serle de utilidad al que la recibe. (¿Cuál es su chocolate favorito? No cuál es el que a mí me gusta regalar.) Además, las opiniones pre-concebidas, las percepciones y los estereotipos de otros pueden interferir en nuestros esfuerzos por servir. A veces aún cuando nuestros motivos sean buenos, nuestras acciones son totalmente mal interpretadas por los demás, debido a su marco cultural o aún a sus inseguridades.

Aplicar el modelo de liderazgo “encarnacional” comienza con un cambio de actitud. De la misma manera que Jesús fue un niño indefenso, nosotros debemos acercarnos a las situaciones de liderazgo con humildad y con la disposición de aprender. 

  • El primer paso hacia el modelo de liderazgo “encarnacional” es la aceptación propia. La aceptación propia implica reconocer que Dios ha creado a cada persona intencionalmente y de manera única, y que Él soberanamente le ha permitido tener experiencias propias a lo largo de su vida para desarrollar en la persona los valores culturales que tiene hasta ahora.
  • Segundo, es importante que un líder reconozca sus propios valores personales, pero que también esté dispuesto a adaptarlos si es necesario. (¿Regalaría mi golosina favorita?) El poder de Dios para ayudar a la gente a ceder sus propias preferencias y necesidades a las de los demás es un elemento indispensable de la encarnación. Sin la confianza en el poder de Dios para cambiar vidas, no habrá mucha esperanza para este difícil proceso de la encarnación. Afortunadamente con el deseo, el esfuerzo y la ayuda de Dios, los líderes pueden cambiar y crecer en su liderazgo “encarnacional”.

**El ejemplo del Chocolate es de The Shaping of Things to Come (2003) by M. Frost & A. Hirsch (pp. 33-62) Hendrickson Publishers.

***En el siguiente post explicaré seis habilidades que podemos desarrollar en nuestro liderazgo “encarnacional”…¡mantente atento! 

¿Cómo aplicarías una actitud de encarnación a tu liderazgo? 

¡Padres, están edificando líderes!

Photo courtesy of Sarah Joelle Photography http://www.sarahjoellephotography.com/

En medio de pañales, biberones, berrinches y nalgadas podría no parecerte que estás edificando líderes mundiales, pero ¡SÍ LO ESTÁS HACIENDO! Jamás invertirás más tiempo, energía o amor en otro discípulo, aprendiz o líder joven de lo que lo harás en tus propios hijos. Lo que les enseñes cuando son niños pequeños es importante… y es la base de los valores profundos y de las convicciones que tendrán – o no tendrán – cuando sean adultos. Aquí hay algunas “ideas de capacitación en liderazgo” que te ayudarán como padre hoy y ayudarán a tus hijos a estar mejor preparados para el mundo mañana.

Valorar a la gente – Enseña a tus hijos a saludar respetuosamente. Cuando les presentes a alguien, pueden responder con un “Hola” y un apretón de manos o algún otro saludo apropiado. Y cuando sean más grandes, podría ser un educado: “Mucho gusto, me llamo…” Quizá habrá una o dos preguntas más y después pueden salir corriendo a jugar. No tienen que quedarse a escuchar la conversación aburrida de los adultos a menos que así lo deseen y sea apropiado. No les hacemos ningún bien al dar excusas por su desobediencia con: “Es muy tímido(a).” De la misma forma que Dios valora a la gente, ellos pueden aprender a valorar a la gente también. En el futuro, Dios les podría pedir saludar a la persona junto a ellos en un avión o a su vecino o en el trabajo. Les ayudará recordar, “Puedo hacerlo…sólo decir hola. Si la conversación va más allá, que bueno, si no, está bien también; puedo mostrarles honor y respeto. Puedo hacer eso.” Quien sabe a dónde pueda llevarles una simple presentación…

Tener límites saludables – No estaba segura por qué no me gustaba que mis hijos jugaran con las cosas dentro de mi bolsa. Pensé que quizá estaba siendo egoísta, que solamente tenían curiosidad y estaban explorando, pero pronto me di cuenta de que mis hijos deberían aprender a tener límites saludables. No todo lo que está en la casa es para que lo toquen o para que lo jueguen. Es importante que aprendan a pedir permiso antes de tocar algo que le pertenece al alguien más, ya sea de su hermano, su hermana, de papá, de mamá o de un amigo. Si practican esto en casa, no será tan difícil llevarlos de visita a otro lado. Cuando los niños aprenden que no todo es suyo, estarán mejor preparados cuando sean adultos para estar contentos con lo que tienen y a respetar apropiadamente el cuerpo o las pertenencias de los demás.

Flexibilidad – Piensa en una rutina que sea “reproducible”. Especialmente a la hora de irse a dormir, considera crear una rutina que puedas realizar fácilmente en cualquier otro lado: un cuento, una oración, quizá su cobija o juguete preferido… pero no permitas que el niño necesite completa oscuridad, un ventilador, silencio total, etc. porque eso causará problemas después en lugares nuevos o diferentes.  Tener una rutina simple le permite al niño ser mucho más flexible para viajar y para practicar la hospitalidad (compartir o ceder su cuarto temporalmente a alguien más). Esto te ayuda a enseñarle al niño que “¡No todo el tiempo todo el mundo va a atenderte a ti!” También ayuda a moderar el egoísmo y a evitar que sea muy exigente en el futuro. 

Comunicar –  Las habilidades de comunicación son muy importantes y hay muchas maneras para que crezcan en estas habilidades cuando los niños son pequeños. La clave es no hablar por ellos una vez que ya son capaces de hacerlo por ellos mismos. Aún cuando todavía no sepan hablar, ellos ya pueden comunicar “por favor” y “gracias” con señas. Pueden aprender a disculparse y a pedir perdón. Puedes darles la oportunidad de ir  al mostrador y pedir un popote o una servilleta extra. Cuando son más grandes, deberían ser capaces de ir a hablar con su maestra y pedirle ayuda extra para mejorar una baja calificación. Cuando los niños aprenden a comunicarse, ganan confianza y destreza. Ellos aprenden cómo construir relaciones y a usar sus palabras para bendecir a otros.

Éstas son algunas oportunidades de aprendizaje para nuestros pequeños líderes. Seguido dijimos mi esposo y yo: “Siempre vamos a amar a nuestros hijos, pero queremos que también les caigan bien a los demás.” Considera a largo plazo los beneficios de tus esfuerzos diarios. ¡Estás construyendo el futuro!

¿Cuáles serían algunas de tus ideas de capacitación en liderazgo?

¿Cómo mantienes el futuro en mente al criar a tus futuros líderes mundiales?

¿cómo se ve un movimiento?

Después de leer mi post “¡sé parte de un movimiento!”, un amigo me pidió más detalles. Él quería saber más acerca de cómo se ven los movimientos… Me encantaría compartir eso contigo.

Definimos un movimiento como: “Dios trabajando a través de un equipo de personas con un mismo corazón que están ganando, edificando y enviando.”

Un movimiento incluye cuatro elementos:

  •  Conectar a la gente perdida con Jesús
  • Discipulado que cambia vidas
  • Líderes multiplicadores
  • Genera recursos locales (visión, gente, ideas, dinero, sistemas, etc.)

En ambos movimientos, estaba claro que Dios estaba haciendo el trabajo. La oración personal y en grupo era algo común – a veces programada, muchas veces espontánea – debido a un profundo sentido de dependencia de Dios. Estudiamos su Palabra y dimos pasos de fe. Confiamos en el Espíritu Santo para que nos controlara y nos guiara. No sé si nuestras acciones “causaron” que hubiera un movimiento – eso fue solamente la decisión de Dios, pero fuimos intencionales al abrir nuestro corazón para que Él pudiera trabajar en nosotros.

El equipo fue otro factor clave. Uno de los equipos de movimiento incluyó muchos coordinadores de tiempo completo y estudiantes líderes; el otro tenía solamente una coordinadora y un grupo de adultos voluntarios. En cada uno de los casos el equipo estaba apasionado por alcanzar a su audiencia para Cristo. Los miembros del equipo estaban comprometidos unos con los otros – creciendo en su carácter, comunicándose, compartiendo responsabilidades, aprendiendo y capacitándose, disfrutando el trabajo y la vida juntos. Los equipos no eran perfectos – a veces hubo conflictos de personalidad; a veces los miembros no querían hacer su parte del trabajo; a veces los voluntarios decidieron involucrarse en algo más… pero el equipo proveyó de la fuerza y el ánimo necesarios para la tarea.

En ambos movimientos, estábamos comprometidos con el evangelismo – conectando a la gente con Jesús. En el movimiento universitario, intencional y estratégicamente compartimos con cualquier estudiante que venía por segunda vez a una reunión. Capacitamos a nuestros coordinadores y estudiantes en cómo evangelizar y muchas veces fuimos juntos a compartir.  El movimiento de mujeres también estaba comprometido a capacitarse y compartir de Cristo en su estudio de un libro; ellas frecuentemente tenían la oportunidad de compartir uno a uno después de una pequeña reunión del grupo. Ambos movimientos también organizaron numerosos eventos especiales evangelísticos. Basicamente, el evangelismo era una prioridad – en el corazón y en la práctica.

La increíble transformación sucedió a través de un discipulado que cambia vidas. En ambos casos, vimos un crecimiento en el deseo de conocer la Palabra de Dios y aplicarla en la vida. Enseñamos el seguimiento básico, el ministerio del Espíritu Santo y otros estudios bíblicos. Los estudiantes escogieron no mentir o sobornar a sus profesores para obtener mejores calificaciones. Las mujeres escogieron perdonar a sus esposos y fortalecer sus matrimonios. Las parejas de novios escogieron terminar su relación en lugar de seguir cometiendo inmoralidad. Las madres escogieron reconciliarse con sus hijos. Los estudiantes escogieron servir a Dios en el ministerio después de graduarse.

Líderes multiplicadores. En el movimiento estudiantil, registramos cadenas de discipulado hasta de cuatro generaciones. En el movimiento de las mujeres ¡perdimos la cuenta de las generaciones! Se volvió algo “normal” para todas invitar a sus amigas a los eventos o estudiar el seguimiento con algunas amigas, o dirigir grupos pequeños, o ser anfitriona de un grupo de estudio de un libro. Los estudiantes y voluntarias lideraron alcanzando áreas de la universidad o dirigiendo actividades del ministerio (oración / eventos sociales / seguimiento) o afinando detalles de los eventos. Todos encontraron un lugar para servir.

No hubo falta de recursos. Los estudiantes seguido se ofrecían a traer botanas y comenzaron a apoyarse unos a los otros y/o a trabajar juntos para enviarse unos a otros a congresos y viajes misioneros. Hubo muy pocos subsidios de afuera. Las mujeres tenían estudios en sus casas, compartían la comida, y donaron muchas cosas y dinero para los eventos evangelísticos para que siempre fueran autofinanciables y muchas veces hasta hubo ganancias. Continuamente surgían ideas creativas. Creamos nuevos materiales y formamos nuevas alianzas. Reclutamos más gente.

Dios nos bendijo. Se volvió imposible medir el impacto mientras la creatividad floreció y la iniciativa comenzó a crecer. Años después, ese ministerio universitario sigue produciendo obreros. Muchos de los que se graduaron comparten de Cristo en su lugar de trabajo y llevan su matrimonio e hijos al Señor. El movimiento de mujeres continúa su trabajo en proyectos que se van a expandir a otras ciudades de México.

Conectar a los perdidos con Jesús. Discipulado que cambia vidas. Líderes multiplicadores. Generación de recursos locales. Así se ve un movimiento.

¿Cuál de los elementos de un movimiento te emociona más?

¿Cuál de los elementos de un movimiento te resulta más desafiante?